RESISTAMOS FIRMES EN LA FE, 1Pe, 5,8-9
Padre Arturo Pichardo Díaz, Párroco.
Existen personas que pierden la fe en medio de las pruebas y las dificultades de la vida; no permitamos que eso ocurra en estos momentos difíciles que vivimos a causa del coronavirus o covi-19, el cual provoca cada vez más limitaciones a la vida, la salud, la alimentación, el trabajo y las libertades de las personas y otras situaciones que nos atribulan. Nos dice el Apóstol Pablo que “la tribulación engendra la paciencia; la paciencia, la virtud probada, esperanza y la esperanza no falla”. Rm 5, 3-5
A propósito de la paciencia y la confianza, nos dice el libro del Eclesiástico:
“Hijo mío, si tratas de servir al Señor, prepárate para la prueba. Fortalece tu voluntad y sé valiente, para no acobardarte cuando llegue la calamidad. Aférrate al Señor, y no te apartes de él;
así, al final tendrás prosperidad…” Eclo, 2, 1-13
El Apóstol Santiago nos dice: “Hermanos míos, siéntanse realmente dichosos cuando se vean rodeados por toda clase de pruebas, pues saben que la calidad probada de nuestra fe produce paciencia”. St 1,12
A propósito de la cuarentena que pasamos, no sólo nosotros, sino mucha gente en el mundo, San Pablo nos da palabras de aliento: “Tres veces fui azotado con varas; una vez lapidado; tres veces naufragué; un día y una noche pasé en alta mar; he visto peligros…noches sin dormir, muchas veces hambre y sed”. 2Cor 12, 25-27. Es verdad que las circunstancias son diferentes a la Pablo, a él le ocurrían estas cosas cumpliendo su misión, pero él venció todo eso con la fuerza y la gracia de Dios. No nos desesperemos. Tampoco se nos ocurra que esto es un castigo divino, como creen algunos. El Dios que nos reveló Jesús, el Padre, es amor y misericordia. Es un padre bueno y sólo quiere el bien para sus hijos e hijas.