Versículos selectivos del Salmo 21
El Salmo 21 nos ayuda a orar en la situación de peligro en que nos encontramos. El Señor nunca nos abandona y menos en el peligro. A continuación, algunos versículos de este Salmo.
«Tú eres quien me sacó del vientre, me tenías confiado en los pechos de mi madre; desde el seno pasé a tus manos, desde el vientre materno tú eres mi Dios.
No te quedes lejos, que el peligro está cerca y nadie me socorre.
Pero tú, Señor, no te quedes lejos; fuerza mía, ven corriendo a ayudarme.
Líbrame a mi (y a nuestro pueblo) de la espada, y a mi única vida de las garras del mastín; sálvame de las fauces del león…
Porque del Señor es el reino, él gobierna a los pueblos.
Me hará vivir para él, mi descendencia le servirá, hablarán del Señor a la generación futura, contarán su justicia al pueblo que ha de nacer; todo lo que hizo el Señor».
Nota: oremos este Salmo en plural, no sólo pidiendo por nosotros y por los nuestros, sino por todo nuestro país y por toda la humanidad que está agobiada por la pandemia que nos afecta.
Recordemos la Palabra de Jesús: «Vengan a mí todos los que estén cansados y agobiados y yo los aliviaré», Mt. 11, 28